Comenzaba fuerte la 43ª edición de la Route d’Occitanie, cuatro días de competición en Francia con marcado acento de montaña. Una jornada larga, de 175 kilómetros, con cuatro subidas y doble paso por la intensa y explosiva Côte d’Aubignac, abría la carrera para Caja Rural-Seguros RGA.
Cazados los cuatro aventureros del día (Delage, Chetout, Turek y Holler), el pelotón afrontaba la primera ascensión a un puerto de apenas 4 kilómetros pero unas rampas medias por encima del 8%. Apenas veinte unidades superaban esa primera selección y ahí se encontraban dos hombres de la formación verde: Cristian Rodríguez y Alex Aranburu.
El guipuzcoano confirmaba sus buenas piernas poco después, en la segunda subida a Aubignac, respondiendo en primera persona a ataques de Rigoberto Urán o Alejandro Valverde. Aranburu, que volvió a mostrar su valentía siguiendo al campeón del mundo en un corte cerca ya de meta, cruzaba la línea en séptimo puesto, a pocos segundos de un Valverde que se hacía con la primera victoria en Francia.
Alex Aranburu: «Movistar se ha puesto muy violento en la primera subida a Aubignac, pero me encontraba bien, me sentía con buenas piernas resistiendo ese ritmo. En la siguiente ascensión han empezado duro desde abajo. Arrancó Urán, respondió Valverde y después lo hice yo. Desde ahí fuimos a palos casi hasta arriba. A falta de 300 metros arrancó Valverde y ahí no pude hacer nada pero conseguí acabar séptimo a pocos segundos. Contento con las sensaciones, sabía que llegaba bien. En Madrid me encontré bien, en Hammer Series también… pero aquí hay mucho nivel y siempre hay que esperar a ver qué tal va. Mañana parece más sencillo; la tercera jornada será muy dura. Veremos que tal me encuentro para ese día».
Foto: Route d’Occitanie / A. Lipke